Los vestidores en forma de «L» resultan ideales para aprovechar cada rincón de una habitación. No hace falta que cuentes con una gran estancia para tener el vestidor que tanto has soñado: puedes encargarlo a medida.
¡Inspírate con estos trabajos reales!
3 ejemplos de vestidores en forma de «L» pequeños
- Vestidor en L pequeño abierto. Hay quienes tienen dudas sobre qué es más conveniente, si un vestidor abierto o cerrado. Cada uno tiene sus ventajas y desventajas, pero, sin duda, cuando dispones de poco espacio eliminar las puertas de la ecuación puede ser una buena solución.
- Vestidor pequeño con varios módulos. Lo bueno de apostar por un vestidor a medida es que puedes elegir las divisiones que mejor encajen con tus necesidades. En este trabajo real, el cliente quería varios módulos distintos combinados con cajoneras.
- Vestidor en «L» blanco con detalles en roble. El color blanco aportar luminosidad a las estancia y hace que los espacios sean más amplios. Las tablas en tono roble y las perchas en negro le dan un toque de color al vestidor.
¿Tienes alguna idea en mente? ¿Te ha inspirado alguno de estos trabajos? Si quieres saber cuánto te podría costar tu vestidor, mándanos las medidas por WhatsApp y te damos un presupuesto aproximado sin compromiso.